Alojamiento de las cobayas

¿Dónde debe vivir la cobaya?

Dado que la cobaya es un animal muy sensible a las temperaturas extremas (debe vivir a una temperatura de entre 17ºC y 24ºC aproximadamente), lo recomendable es que viva dentro de nuestra casa y no en exteriores, ya que de ese modo podremos controlar la temperatura ambiente (evitando que sufra hipotermia o un golpe de calor) y además evitaremos exponerla a insectos, parásitos y condiciones meteorológicas adversas.

Sin embargo, esto no implica que no podamos sacarla al exterior ocasionalmente (eso sí, siguiendo una serie de precauciones para evitar problemas).

Parque de cobayas

Otro requisito importante es que debería vivir en total libertad o con la mayor libertad posible, para de ese modo mantenerse activa físicamente y que vea satisfecha su innata necesidad de curiosear y explorar. Esto es muy importante, ya que las cobayas que viven encerradas permanentemente o durante la mayor parte del día (y especialmente si viven sin la compañía de otras cobayas y en recintos pequeños) son más propensas a desarrollar problemas de salud físicos (sobrepeso u obesidad, artritis, cálculos / piedras en el sistema urinario...) y psicológicos (tristeza, ansiedad, depresión...).

En los siguientes puntos hablaremos sobre los 7 elementos indispensables para crear el hogar de nuestra cobaya y que vea cubiertas tanto sus necesidades físicas como psicológicas.

La jaula o parque

La cobaya debería vivir en una jaula o parque que cumpla los siguientes requisitos:

  • Si es una jaula, ha de ser para cobayas o conejos: una jaula para hámsteres es demasiado pequeña, una jaula para aves es extremadamente pequeña y además tiene rejas en el suelo (provocan heridas y lesiones en las patas de la cobaya), una jaula para chinchillas o hurones tiene muchos pisos (propicia caídas y dificulta el movimiento de la cobaya al ser más alta que ancha) y una pecera es para peces (es extremadamente pequeña y no tiene una buena ventilación).
  • Base o cubeta de plástico: es el material ideal ya que no absorbe la orina, por lo que es mucho más higiénico y fácil de limpiar. Además, también es más económico y duradero que la madera.
  • Base o cubeta lisa: las rejas o agujeros pueden provocar lesiones si la cobaya se engancha un dedo o una pata en uno de los huecos.
  • Con puerta o apertura lateral accesible: para que la cobaya pueda entrar y salir cuando guste con facilidad y sin que exista riesgo de que se lesione.
  • Que cumpla con los tamaños mínimos recomendados según el número de cobayas que vivirán en la misma jaula o parque:
Tamaño mínimo de la jaula o recinto

La ubicación de la jaula o parque también es importante, ya que debería colocarse en una zona de la casa:

  • Donde los/as humanos/as pasamos la mayor parte del día: de este modo, la cobaya se acostumbrará más fácilmente a los sonidos y olores del hogar, así como a nuestra presencia.
  • Con una temperatura aproximada de entre 17ºC y 24ºC: como ya hemos mencionado anteriormente, la cobaya es un animal que lleva muy mal las temperaturas extremas, especialmente en el caso del calor.
  • Donde entre luz solar pero sin incidir directamente sobre la cobaya: las cobayas necesitan la luz solar para obtener vitamina D, cuya deficiencia provoca serios problemas de salud (por ejemplo, cálculos / piedras en el sistema urinario por una mala absorción del calcio por parte del organismo).
  • A la altura del suelo: las zonas elevadas son peligrosas porque si la cobaya corre y la jaula o parque se mueve, existe un riesgo de que se caiga al suelo. Además, al no estar a la altura del piso, es imposible que la cobaya pueda salir y moverse libremente.
  • Donde no haya animales omnívoros o carnívoros como perros y gatos: por muy domesticados que estén, siempre existe la posibilidad de que el instinto depredador del animal aflore en cualquier momento, poniendo en peligro la vida de la cobaya.
Tipos de jaula o parque aptos y no aptos

El sustrato o lecho

El sustrato o lecho es el material que se dispone en el suelo de la jaula o parque de la cobaya con el objetivo de absorber la orina y así evitar que la cobaya esté en contacto directo con ella, con todos los riesgos que ello conllevaría para su salud (pododermatitis, cistitis, resfriado...). Hay que recordar que la cobaya, a diferencia del conejo, es un animal al que es casi imposible acostumbrar a usar un esquinero, por lo que el sustrato o lecho debe cubrir toda la superficie de la jaula o parque.

Existen muchos tipos de sustrato o lecho en el mercado, pero no cualquiera es apto para cobayas. El sustrato o lecho que usemos con nuestra cobaya debe cumplir con los siguientes requisitos:

  • Gran capacidad de absorción: para evitar problemas de salud como pododermatitis, cistitis, resfriado...
  • No desprender polvo: la cobaya inhala el polvo al respirar y a corto plazo le ocasiona estornudos, tos y mucosidad. A medio-largo plazo acaba causando problemas respiratorios graves como rinitis o infecciones respiratorias.
  • Suavidad: los sustratos o lechos duros irritan las patas y pueden llegar a ocasionar pododermatitis. Además, dificultan el movimiento y provocan incomodidad a la cobaya.
Tipos de sustrato o lecho aptos y no aptos

Los tres tipos de sustrato o lecho recomendables para la cobaya son:

  • Liner (2 mantas polares con 1 material absorbente en medio): la orina es absorbida por la manta polar superior y pasa al material absorbente, donde queda retenida. Es el suelo ideal para cobayas dado que no desprende polvo, la superficie se mantiene seca y la textura es suave para sus delicadas patitas. Además es lavable y, por lo tanto, la opción más duradera y económica. Para aprender más sobre cómo implementar este método en el recinto de tu cobaya de forma eficaz, haz clic aquí.
  • Empapador + Manta polar / Escurreplatos: los empapadores son unos pañales que se sitúan por debajo de una manta polar o un escurreplatos/antideslizante (una tela plástica que repele el líquido al dejarlo pasar a través de unos agujeritos) para evitar que la cobaya los muerda o los mueva. La manta polar o el escurreplatos/antideslizante tienen que lavarse regularmente. Es una opción sana para la cobaya ya que no desprende polvo, pero los empapadores son bastante caros y duran relativamente poco.
  • Lecho de papel + Manta polar / Escurreplatos: el lecho de papel es altamente absorbente y el único sustrato comercial para cobayas que no desprende polvo. Al ser duro, lo recomendable es disponer por encima una manta polar o un escurreplatos/antideslizante (una tela plástica que repele el líquido al dejarlo pasar a través de unos agujeritos) para evitar que provoque irritación en las patas de la cobaya. La manta polar o el escurreplatos/antideslizante tienen que lavarse regularmente. Es una opción sana para la cobaya ya que no desprende polvo, pero el lecho de papel es bastante caro y dura relativamente poco.

Por el contrario, no son aptos para la cobaya los siguientes sustratos o lechos:

  • Papel de periódico: no aborbe la humedad, sino que se encharca, por lo que contribuye al desarrollo de problemas de salud como pododermatitis, cistitis, resfriado... Además, la cobaya puede comerlo y, dado que contiene tintas y otros productos químicos en su composición, implica un riesgo aún mayor para su salud.
  • Arena de gato: desprende gran cantidad de polvo, por lo que contribuye a que la cobaya desarrolle problemas respiratorios graves como rinitis o infecciones respiratorias.
  • Serrín, viruta o pellets de madera: desprenden gran cantidad de polvo, por lo que contribuyen a que la cobaya desarrolle problemas respiratorios graves como rinitis o infecciones respiratorias. Además, la mayoría de ellos están hechos a base de madera de cedro o pino; maderas que desprenden fenoles, ácido plicático (cedro) y ácido abiético (pino), los cuales contribuyen al desarrollo de problemas hepáticos y respiratorios en conejos y roedores.

¿Es mejor tener dos cobayas o una?

La cobaya necesita la compañía de al menos otro miembro de su misma especie ya que, tal y como explicamos en la sección de HISTORIA, es un animal gregario y altamente social. En estado salvaje solían vivir en grupos familiares de un mínimo de 10 cobayas para reducir el riesgo de ser atacados por depredadores. En estos grupos solía haber varias hembras, uno o dos machos y las crías.

Las cobayas que viven sin la compañía de más cobayas tienden a ser menos activas y a aburrirse más, por lo que son más propensas a desarrollar estrés, ansiedad, depresión y obesidad. Esto reduce mucho su calidad de vida y hace que vivan menos tiempo.

No se puede suplir la necesidad de compañía de las cobayas con animales de otras especies. Mezclar cobayas con otras especies como otros roedores o los conejos puede ser peligroso para su salud y vida. Tampoco sirven de reemplazo los peluches o mucha atención por tu parte. Un dato curioso es que desde 2008 en Suiza es ilegal tener una sola cobaya ya que se considera un delito de maltrato animal.

Convivencia entre cobayas

A la hora de planificar darle compañía a tu cobaya, debes elegir una de las cuatro combinaciones seguras (incluidas en la imagen de abajo) que te permitan evitar la cría descontrolada (con todos los riesgos que esta implica tanto para la madre como para las crías: abortos, infecciones uterinas, endogamia, malformaciones, muerte...) y conflictos entre machos por las hembras.

Aún así, recuerda que indiferentemente de la combinación de sexos y de si están esterilizadas o no, cada cobaya tiene su propio carácter y no todas las cobayas se llevan bien, por lo que es imposible predecir si dos cobayas se llevarán bien o mal al igual que es imposible predecir si dos personas congeniarán o no.

Posibles combinaciones de convivencia segura

La henera

Debe haber al menos una henera en la jaula o parque de la cobaya ya que, tal y como hemos visto en la sección de ALIMENTACIÓN, el heno es la base de su dieta sólida.

La henera debe ser accesible y segura, de forma que la cobaya no tenga problemas para alcanzar el heno y al mismo tiempo que su diseño no implique el riesgo de que se pueda meter dentro y quedarse atascada, lesionarse o ahogarse.

Distintos tipos de henera

El bebedero

Debe haber al menos un bebedero en la jaula o parque de la cobaya ya que, tal y como hemos visto en la sección de ALIMENTACIÓN, el agua es la base de su dieta líquida y debe disponerse siempre en un bebedero y no en un cuenco (para garantizar la higiene del agua, evitar derrames o que la cobaya se meta dentro).

El bebedero debe ser y estar:

  • Accesible: a una altura que permita a la cobaya alcanzarlo y poder beber de él cómodamente. Una altura demasiado elevada puede contribuir a que la cobaya beba menos para evitar el esfuerzo.
  • Antigoteo: para que no pierda agua y no encharque el suelo del recinto.
  • Fácil de desmontar: para poder lavarlo en profundidad y sin necesidad de herramientas especiales.
  • Limpio: cada vez que la cobaya bebe, una pequeña parte de los restos de alimentos que hay en su boca pasan al bebedero, por lo que es impresindible lavarlo regularmente para evitar que se formen hongos dentro y luego la cobaya los ingiera (con los riesgos que ello implica para su salud).

Distintos tipos de bebedero

El comedero

Debe haber al menos un comedero en la jaula o parque de la cobaya ya que, tal y como hemos visto en la sección de ALIMENTACIÓN, las verduras y frutas (y opcionalmente el pienso o alimento balanceado) forman parte de su dieta sólida y se sirven en él.

El comedero debe ser y estar:

  • Bajo: con una altura que permita a la cobaya alcanzar el contenido y poder comer cómodamente. Una altura demasiado elevada puede contribuir a que la cobaya vuelque el comedero al intentar comer de él.
  • Difícil de mover o volcar (de cerámica): para evitar peleas entre las cobayas al comer (que tiren del comedero hacia ellas) y para evitar que lo muerdan o vuelquen.
  • Limpio: al servir las verduras y frutas siempre quedan restos y humedad, por lo que es importante lavar el comedero cada día para evitar la proliferación de bacterias y hongos, especialmente si hace calor.

Distintos tipos de comedero

El escondite o madriguera

Como ya hemos explicado en la sección de HISTORIA, la cobaya es un animal de presa, por lo que su naturaleza es desconfiada y asustadiza por supervivencia. Es por ello que en su jaula o parque debe disponer de al menos un escondite o madriguera, es decir, un espacio cubierto de intimidad donde pueda sentirse protegida y tranquila.

Su función es fundamental, especialmente en los primeros días e incluso meses de la cobaya en casa, cuando está aún asustada y no tiene confianza con el entorno (jaula o parque, olores, sonidos...) y los/as humanos/as. La cantidad de estos escondites o madrigueras debe ir en función del número de cobayas que convivan en el mismo recinto para evitar peleas por el mismo refugio.

Debe estar fabricado con materiales seguros para cobayas y con las medidas necesarias para que la cobaya pueda entrar y salir sin riesgo de quedarse atascada o lastimarse. En cuanto a la forma, puede ser muy variada:

Distintos tipos de escondite